En este articulo les dejamos algunos documentos que demuestran categoricamente que este agente de la CIA llamado Mr. Bell participo en el asesinato de Trujillo. Favor analizar objetivamente todos los datos…
En un documento desclasificado de la CIA su asociación en el asesinato de Trujillo se confirma aún más. Esto es parte de una nota del archivo desclasificado.
“La relación de Bell con el asesinato de Trujillo revela nuevamente una indicación de que Bell era operativo clave de la CIA en tales operaciones de “acción ejecutiva”.
Acción ejecutiva fue la iniciativa creada por la CIA para sustituir y asesinar a líderes extranjeros considerados hostil. Otra nota señala:
“Éstos son algunos de los puntos importantes desarrollados en la entrevista con Adam: Su experiencia en la revolución de la República Dominicana revelan Bell a ser un personaje muy importante en esa operación cuyas conexiones a subir los niveles más altos de la comunidad militar y de inteligencia”.
También confirma su estrecha relación con los altos funcionarios del gobierno Dominicano, tales como Imbert Barreras con quien no solamente trabajajo en el 1965 para la invasión estadounidense de la República Dominicana, posiblemente sus relaciónes iniciaron durante su colaboración en seguir instrucciones para asegurar de tapar los hechos que implicaban a la CIA de lo que realmente sucedió el 30 de mayo del 1961 ya que Bell antes de su muerte dio testimonio a los investigadores del asesinato de JFK que el ametralló a Trujillo cuando bloquearon el carro de Trujillo con un árbol. Parte del testimonio pueden verlo en este video.
La imagen muestra Bell con Imbert Barrera en el 1965 en República Dominicana.
Otra prueba de la implicación de Bell en el asesinato de Trujillo se ve en este artículo de los 1960’s a partir de un investigador principal que viajó a los días después del asesinato a Santo Domingo y publico sus conclusiones sobre la base de los informes presentados y testimonios de los involucrados.
“A finales de 1960, Bell llegó a Santo Domingo y alquiló una casa que daba a la avenida George Washington, el área de ensayo del asesinato. Bell hizo las rondas de Santo Domingo en indiferente sin preocupacion, parecia ser otro solo empresario yanqui fuerte-bebedor, interesado en el procesamiento de jugo congelados. En realidad, él era el maestro armero de operaciones silencio de letalidad de la CIA, el jefe de máquinas de silenciadores, rifles, bombas de asesinato exóticas, y otros pertrechos de una “acción ejecutiva.
La apariencia de Bell significaba que el día del juicio (Judgment Day) estaba a la mano en Santo Domingo. Algunos de los amigos de Trujillo más conocedores y influyentes de America hizieron un último esfuerzo para decírselo”.
Biografia del agente Bell…
Mr. Bell era un rico, traficante de armas internacional, diseñador de silenciadores, y el operador encubierto de operaciones de la derecha. Se le conoce como el “Mago de muertes silenciosas“, por ser el diseñador preeminente del silenciador de hoy en día, su trabajo le atribuye que permite el uso generalizado de los rifles de francotirador con silenciador en la guerra de Vietnam. Hay quienes sospechan que en el asesinato de John F. Kennedy algunos de los disparos de fusil puede haber sido disparada en la Plaza Dealey utilizando supresores de sonido de Mr. Bell.
En la Segunda Guerra Mundial, sirvió como agente secreto en el teatro de China-Birmania de las operaciones de la Oficina de Servicios Estratégicos (precursor de la CIA, haciendo Bell, en palabras de Gaeton Fonzi, “un miembro de la vida cuotas pagados de la la red de la inteligencia secreta estadounidense Old Boys “). Tal vez la mejor defensa de Bell es su larga y dedicada asociación con el gobierno de los Estado Unidos. A pesar de que nunca ha sido un empleado pagado del gobierno, sus viajes en todo el mundo en una operación secreta asignaciones han sido, sin embargo, en relación con una operación gubernamental. “No fue un error”, Marger señala, “que Bell estaba en uno de los tanques de plomo en la invasión marina de la República Dominicana en la década del 1960.
En 1964 Bell viajó a la República Dominicana para ayudar a la CIA en sus esfuerzos para prevenir el presidente Juan Bosch de reasumir el cargo después de que la junta militar que lo derrocó en 1963 fue a su vez tambien derrocada
En 1965, Bell era un asesor de paramilitares para el Gobierno de República Dominicana, cuando una guerra civil respaldada por comunistas erupto. Dos años más tarde, él fue acusado en una conspiración contra el régimen de Castro en Cuba. Los cargos fueron retirados más tarde.
Cuando estos y esfuerzos similares fracasaron, la división aerotransportada 81 del Ejército de EE.UU., comandado por el asociado de Mr. Bell, el Coronel Robert, invadió la República Dominicana en 1965. Pronto, fueron aplastados esfuerzos para reinstalar Juan Bosch, e instalaron un gobierno títere de la CIA.
En el 1965 David A.P se hizo jefe de estación en República Dominicana tras la decisión de LBJ para enviar a los marines de Estados Unidos para reforzar la lucha del gobierno de la derecha contra los rebeldes de izquierda. Sirviendo como asesor de la CIA militar de la República Dominicana estaba Mr. Bell, un veterano de la Oficina de Servicios Estratégicos y proveedor de dispositivos de asesinato de la CIA sofisticados.
Entre sus intrigas extranjeras independientes, Bell hizo el trabajo encubierto al dictador cubano Batista en 1959 y para Imbert Barreras, el militar en la República Dominicana en 1965; viajó a Centroamérica en 1982 para apoyar a Mario Sandoval Alarcón, en un intento de golpe de estado en Guatemala.
En 1966 Bell sirvió como asesor en el Proyecto de Nassau, un plan de invasión de Haití por exiliados cubanos y haitianos para derrocar al dictador Francois “Papa Doc” Duvalier. De acuerdo con Fonzi, quien en la década de 1970 fue un investigador personal para el Comité de Inteligencia del Senado, “alguien que había estado cerca de Bell” sugirió al comité del Senado que Bell estaba relacionado con el asesinato de Kennedy.
Bell le dijo a Fonzi, “Siempre he cooperado muy de cerca” con la CIA, pero “yo nunca he permitido que me paguen un maldito centavo. Yo no lo necesito. “Él admitió haber participado en algunos intentos de asesinato de Castro. “Estaba sentado en Miami”, dijo, “con un maldito millon de dólares en efectivo para el tipo que iba quitar del medio a Fidel.